Pablo Molano, conocido luchador social de
Barcelona, se quitó la vida en 2016. Su muerte abrió un abismo –que se
ha ido llenando de preguntas- en la comunidad de lucha a la que
pertenecía.
En este hermoso volumen, de una belleza caníbal, Santiago
López Petit, amigo de Pablo y miembro de esa comunidad, trata de
responder a muchas de esas preguntas –en la mayoría de los casos
planteando más preguntas-. Para ello, tomando como punto de partida la
muerte de Pablo, despliega una tan importante como necesaria reflexión
sobre el suicidio: esa práctica cotidiana –y tabú esencial- en nuestra
sociedad enferma. (Pepitas de Calabaza)
***
"Cuando Pablo Molano huyó de la sala de espera del hospital y decidió suicidarse no estaba loco.Cuando en clase de filosofía propuso, ante la sorpresa de los demás estudiantes, traer una llave inglesa para arrancar las sillas que estaban fijadas al suelo y así poder formar un círculo con ellas no estaba loco.Tampoco estaba loco cuando con un grupo de amigos decidió okupar una casa con la finalidad de abrir una universidad libre.No, no estaba loco, pero sus locuras abrieron puertas y ventanas en la pared de cemento gris." (López Petit, 2018. El gesto absoluto, primeras páginas)
---
Relacionados:
No hay comentarios.:
Publicar un comentario